Cómo tratar correctamente las verduras

Hoy en día, el frigorífico es un electrodoméstico totalmente necesario en cualquier vivienda y se cree que es vital para conservar todos los alimentos sin que pierdan sus propiedades. Nada más lejos de la realidad, esto no es del todo cierto. Algo que no conocen muchas personas y que sabemos en Shybari gracias a nuestra larga experiencia trabajando durante años con verduras de máxima calidad, es que introducir una pieza de verdura en el frigorífico hace que ésta vaya perdiendo poco a poco su sabor y su aroma.

Existe un desconocimiento común en nuestra sociedad sobre el refrigerado de las verduras. Es habitual pensar que es necesario guardarlas en la nevera para mantener la frescura de cada pieza y que esto retrasa el proceso de descomposición natural de los alimentos. Sin embargo, lo ideal realmente sería aguantar la verdura sin refrigerar todo el tiempo posible, en alguna zona fresca y bien aireada, de esta manera su sabor o su aroma no se verán deteriorados. Aunque su aspecto siga siendo bueno, no tiene porqué conservar todos sus nutrientes.

Ahora que sabemos que no todas las verduras toleran bien el frío, tenemos que aprender cuáles de ellas se deterioran con las bajas temperaturas. Por ejemplo, no es recomendable meter en la nevera tomates, plátanos o aguacates, pues daña claramente su interior y afecta de forma directa a su textura y sabor. Por otro lado, las espinacas se deshidratan en el frigorífico y deberían mantener su humedad. El calabacín es mejor guardarlo en un lugar seco pues también sufre los efectos del frío.

Ahora que conoces qué verduras es mejor mantener alejadas del frigorífico, ya puedes disfrutar de todo el sabor de nuestros deseos del mediterráneo.